La instalación de plantas eléctricas de emergencia es una cuestión prioritaria para todo negocio, sin importar el sector al que pertenezca. Estos equipos son esenciales para mantener el abastecimiento de energía durante interrupciones o emergencias, asegurando la continuidad de las operaciones durante períodos prolongados. Sin embargo, este respaldo brinda mucho más que un flujo de trabajo ininterrumpido: cuando cuentas con él, proteges tus activos, bases de información, ambientes laborales y, en algunos casos, incluso vidas. Dada su importancia, ¿sabes cómo elegir la mejor? Sigue leyendo y descúbrelo.

¿Qué tipos de plantas eléctricas de emergencia hay?
La instalación de plantas eléctricas de emergencia requiere de una evaluación infraestructural que permita elegir la más adecuada. Aunque todas cumplen la misma función, existen diferentes modelos diseñados para proporcionar suministro eléctrico en contextos específicos. Por ejemplo, una nave industrial requiere de una planta distinta a la de un edificio corporativo o un hospital. Así, actualmente el mercado ofrece dos principales tipos de generadores:
1. De diésel. Funcionan con este combustible, fácil de adquirir y almacenar, por lo que ponerlas en marcha es rápido y sencillo. Son altamente confiables gracias a su gran potencia y eficiencia, así como a su prolongada vida útil. No obstante, son considerablemente grandes, por lo que es necesario un espacio apto para instalarlos. Además, generan emisiones contaminantes, lo que puede afectar la reputación de un negocio.
2. De gas natural. Son menos costosos y contaminantes que las de diésel. Sin embargo, dependen de un suministro constante de gas LP, que puede ser caro de instalar y mantener. Por otra parte, los modelos más modernos aprovechan tanto la dinámica del gas como la energía térmica que produce su mecánica, por lo que pueden ser tan eficientes como una planta de diésel. La principal ventaja de este tipo de generadores es que, a largo plazo, son los más rentables y sostenibles.
Como alternativas ante estos dos modelos, se encuentran las plantas de gasolina, eólicas, solares e incluso híbridas. Cada una de ellas ofrecen ciertos beneficios a la vez que implican ciertos retos a nivel técnico, financiero y operativo. Elegir una u otra depende de numerosos factores, por lo que es aconsejable tomar la decisión con ayuda de un especialista en instalación de plantas eléctricas de emergencia.

¿Qué considerar para la instalación de plantas eléctricas de emergencia?
Para la instalación de plantas eléctricas de emergencia, es fundamental que el experto encargado examine las memorias de cálculo del proyecto ejecutivo arquitectónico. Esto permite conocer con detalle las pautas técnicas de la instalación eléctrica y evaluar los sistemas y equipos esenciales para un negocio, así como en su consumo energético y los picos de demanda. De esta manera, se puede estimar el tipo y cantidad de generadores que convienen más para respaldar las actividades de un área o edificio entero.
Otras de las consideraciones previas se basan en las condiciones infraestructurales y medioambientales del entorno. Por un lado, la instalación de plantas eléctricas de emergencia requiere de cuartos amplios y bien ventilados que estabilicen su rendimiento. Asimismo, debe tomarse en cuenta la altitud sobre el nivel del mar, ya que la presión atmosférica influye en la eficiencia de estos equipos. Por otro lado, nadie quiere un aerogenerador en regiones montañosas o de baja altitud donde, a falta de viento, su funcionalidad se vea seriamente afectada.
La instalación de plantas eléctricas de emergencia también depende en gran medida de las normativas locales. Cada ciudad puede exigir el cumplimiento de ciertas regulaciones ambientales sobre emisiones y ruido, así como de certificaciones específicas para cada equipo. Tampoco hay que olvidar el factor portabilidad: ¿necesitarás mover o transportar tu planta? ¿O quedará fija en un sitio? Por último, recuerda contemplar los gastos de instalación y mantenimiento para asegurar la máxima eficiencia del generador y prolongar su vida útil.
Instalación de plantas eléctricas de emergencia: todos los beneficios
Ahora que ya conoces las consideraciones básicas para una buena instalación de plantas eléctricas, es hora de presentarte las ventajas que estos equipos ofrecen. Al elegir el generador más adecuado a tus instalaciones, necesidades y presupuesto, tu negocio se beneficia con:
1. Operatividad ininterrumpida. Ante cortes en el abasto de electricidad o situaciones de emergencia, tu planta eléctrica respalda tus actividades por lapsos de hasta seis horas. Esta cualidad es especialmente útil en lugares como hospitales, centros de almacenamiento de datos, parques y naves industriales, y edificios corporativos. Con el mantenimiento adecuado, este suministro puede acompañarte durante varios años sin disminuir su fiabilidad ni su potencia.

2. Protección a tus activos. Todo negocio cuenta con aparatos sensibles a sobrecargas y apagones repentinos. Los servidores, sistemas HVAC, computadoras o los equipos médicos, por ejemplo, pueden dañarse tras interrupciones del suministro de energía. Sin embargo, un generador no sólo evita estos cortes abruptos, sino que también proporciona estabilidad en el abastecimiento, reduciendo fluctuaciones y regulando sobrecargas y picos de tensión.
3. Seguridad a los usuarios. En situaciones de desabasto eléctrico, tanto el personal como los clientes se sienten tranquilos al notar que la iluminación y los sistemas de seguridad se mantienen funcionando. Además, los generadores aseguran que tanto los equipos de climatización como las redes de internet y comunicación sigan operando, lo que favorece ambientes confortables para todos.
¿Necesitas ayuda con la instalación de plantas eléctricas de emergencia? Deja que INEIN lo haga por ti. Desde hace más de 15 años, impulsamos el comercio y la industria en México mediante la colocación de equipos y sistemas especializados de última generación. Contáctanos hoy y recibe asesoría inmediata para fortalecer tu negocio con los mejores complementos del mercado. Con INEIN, la excelencia está garantizada.